En julio de 2022 diagnosticaron a Eddie, mi esposo, con un cáncer muy agresivo, fueron muchos meses de quimioterapias, eran 96 horas seguidas cada 21 días conectado a una máquina, semanas en el hospital y los efectos secundarios se hacían cada vez más evidentes y desgastantes.
Un día saliendo de una de las quimio, fuimos a la iglesia para orar el Rosario, pero ese día a él se le quedó el suyo y decidimos comprar uno en la tienda de la iglesia, la señora que atendía nos explicó que esos Rosarios los hacían unas señoras en Colombia y Venezuela y mientras los hacían oraban por la persona que los iba a portar, le dijo a él que lo escogiera porque le llamaba la atención que la medalla le iba a dar un mensaje y ese día por primera vez escuchamos el nombre "Medjugorje", a partir de ese momento esa virgen empezó a presentarse en nuestras vidas de muchas maneras, tan constantes y evidentes que fue imposible no sentir que había una conexión especial.
Empezamos a buscar información de ella y días más tarde nos encontramos de casualidad a una joven que nos habló de como a ella le había cambiado la vida y nos explicó como llegar a ese lugar que nunca imaginamos visitar: Bosnia y Herzegovina, antigua Unión Soviética.
Ese día empezamos a investigar de sus apariciones y milagros.
Unos días después, le prometí a esa virgen que si mi esposo se curaba iríamos hasta allí en persona a agradecerle su sanación. Tan pronto recibimos la remisión empezamos a planear el viaje.
Encontré una agencia que hace peregrinaciones a Medjugorje desde Barcelona y tenían una justo para el día de la aparición. La Virgen se sigue presentando más de 40 años después a algunos de los videntes.
Volamos de Miami a Barcelona, allí pasamos 24 horas. Encontré a través de Booking un hotel hermoso justo detrás de la iglesia La Sagrada Familia, con una vista inigualable de la iglesia.
Recorrimos un poco la ciudad y al otro día entramos a La Sagrada Familia, su arquitectura y detalles son impresionantes. También fuimos al Museo de Miró y en la tarde volamos de Barcelona a Dubrovnik, capital de Croacia en una aerolínea local llamada Vueling.
En el aeropuerto de Croacia nos recogieron de la empresa con la que contratamos el tour para luego ir por carretera 2 horas hasta Medjugorje.
La empresa se llama Red Gospa. Ellos se encargan de todo desde que llegas a Croacia, el transporte hasta Medjugorje, el hotel, la alimentación y las actividades. Algunos de sus planes también incluyen el vuelo.
Yo pensé que seríamos pocas personas pero en realidad era un bus grande con unas 45 personas, la mayoría de España, pero también había personas de Colombia y Argentina. Nosotros eramos los únicos de Estados Unidos. Había familias, parejas, adultos, jóvenes, niños.
La primera noche llegamos tarde, cena y a dormir. A la mañana siguiente desayunamos en el hotel y salimos caminando hasta el monte donde se presentó la virgen por primera vez en 1981. Subimos el monte de piedra haciendo todas las estaciones del Rosario hasta llegar a la cima. Subir no es fácil pero se siente una paz tremenda allá arriba...
Le agradecimos a la virgen nuestro milagro y fuimos muy felices de sentir su presencia.
Recorrimos el pueblo, fuimos a la iglesia y la misa es en croata pero con la ayuda de una radio análoga pudimos escucharla en español, la traducen a más de 10 idiomas y puedes sintonizarla en tu idioma en una frecuencia diferente. Todos los días había actividades relacionadas con la virgen y sus milagros.
Visitamos una comunidad donde rehabilitan jóvenes con diferentes vicios y problemas, ellos dan su testimonio y hablan hermoso de su experiencia en Medjugorje.
Recomiendo cien por ciento Red Gospa si quieres visitar Medjugorje para nosotros la experiencia fue perfecta! El hotel, la comida, las actividades y de lo más lindo que nos quedó, fueron las personas tan especiales que conocimos durante la peregrinación y que ahora consideramos nuestros amigos...
Medjugorje hace parte de nuestro corazón... Volveremos...
De Medjugorje regresamos por carretera a Dubrovnik y volamos a Portugal para visitar otro santuario mariano que les contaré en otro post.
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PD: Todos los detalles de cómo la virgen de Medjugorje nos hizo saber que estaba con nosotros, los cuento en el libro de Luz María Doria, una colega colombiana a la que admiro mucho y me invitó a contar nuestra historia de fé en su último libro "¿Cuánto te pesa lo que te pasa?" para mí es un honor que ella pensara que nuestra historia pudiese ayudar a alguien. Además está en audiolibro y cada persona que ella invitó a participar narra su propia historia y todos los aprendizajes son hermosos.
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